lunes, 13 de octubre de 2008

¿ES CIERTO QUE PIO XII FUE “EL PAPA DE HITLER”?
Julio Alvear Téllez

El Papa Pío XII (1939-1958)

Las agencias internacionales informaron en días recién pasados:

“El Gran Rabino de Haifa, She’ar Yishuv Cohen, expresó su oposición a la beatificación del Papa Pío XII, quien fuera Sumo Pontífice durante la era del Holocausto, durante el discurso histórico que dio ante el Sínodo de Obispos celebrado en el Vaticano.


El Gran Rabino Cohen, invitado por Benedicto XVI al Sínodo de Roma ...
dedicado a difundir infundios contra el Papado

“En lo que fue la primera aparición de un judío ante el máximo órgano representativo de la Iglesia Católica, Cohen, quien había sido invitado a disertar sobre la importancia de la Torá para el pueblo judío, manifestó la decepción de su comunidad frente a la figura de Pío XII.

“Sentimos que el difunto papa (Pío XII) debería haber alzado la voz (en contra del Holocausto) mucho más fuerte de lo que hizo” (...)

El Gran Rabino admitió que es posible que el Papa haya ayudado en secreto a muchas víctimas y refugiados, pero luego agregó: “la pregunta es si podría haber levantado la voz y si esto habría ayudado o no”. “Nosotros, como víctimas, creemos (que la respuesta es) sí, y las familias de los millones de fallecidos no me autorizaron a decir que olvidamos y perdonamos


* * *

Ante estas imputaciones del Gran Rabino contra el Papa Pío XII, lo primero que se me viene a la cabeza es si realmente el líder religioso judío, invitado por Benedicto XVI, emite un juicio particular, fruto de una animadversión personal contra la Iglesia católica, o si habla oficialmente representando a las “victimas de los millones de fallecidos” en el holocausto.

Esto último hay que descartarlo sumariamente. El Gran Rabino, en realidad, se arroga una representación que no tiene, a fin de que sus infundios se puedan divulgar en el mundo judío y no judío con una mayor capacidad de atracción.


¿Para qué? Creo probable que dentro del mundo judío aún persisten llamas de admiración por la protección que el Papa Pío XII prodigó a los hijos del pueblo hebreo durante la persecución nazi. Mancillar su memoria en los momentos en que se cumplen los cincuenta años de su muerte, es entonces una buena ocasión para apagar las brazas de admiración al Papado que puedan quedar aún encendidas, y que pueden tener como fruto futuras conversiones a la fe católica.



Pío XII recibió los agradecimientos de la comunidad judía internacional durante toda su vida


El Rabino Cohen sabe que el célebre Israel Zolli, Gran Rabino de Roma, al terminar la Segunda Guerra Mundial, se convirtió a la fe católica y tomó en el bautismo el nombre de pila de Pío XII, Eugenio, en señal de gratitud por lo que el Papa hizo por los judíos durante el holocausto. En sus memorias ofrece numerosos testimonios sobre la actuación del Pontífice a favor del pueblo hebreo. Su conversión en Roma generó gran impacto en el pueblo hebreo, y trajo como consecuencia el que otros judíos se hicieran católicos, la mayor parte de los cuales profesaron votos religiosos.


El Rabino Cohen no ignora tampoco que acabada la Segunda Guerra Mundial el gran rabino de Jerusalén, Isaac Herzog, envió a Pío XII una bendición especial «por sus esfuerzos para salvar vidas judías durante la ocupación nazi de Italia» y que Giuseppe Nathan, comisario de la Unión de Comunidades Judías Italianas, declaró: «Ante todo, dirigimos un reverente homenaje de gratitud al Sumo Pontífice y a los religiosos y religiosas que, siguiendo las directrices del Santo Padre, vieron en los perseguidos a hermanos, y con valentía y abnegación nos prestaron su ayuda, inteligente y concreta, sin preocuparse por los gravísimos peligros a los que se exponían» (L'Osservatore Romano, 8 de septiembre de 1945, p. 2).

El Papa Pío XII con la corona pontificia

El Rabino Cohen no puede desconocer asimismo que el 21 de septiembre del año 1945, Pío XII recibió en audiencia al Doctor A. Leo Kubowitzki, secretario general del Congreso judío internacional, que acudió para presentar «al Santo Padre, en nombre de la Unión de las Comunidades Judías, su más viva gratitud por los esfuerzos de la Iglesia católica en favor de la población judía en toda Europa durante la guerra» (L'Osservatore Romano, 23 de septiembre de 1945, p. 1),


Y que el 29 de noviembre del mismo año, el Papa recibió a cerca de ochenta delegados de prófugos judíos, procedentes de varios campos de concentración en Alemania, que acudieron a manifestarle «el sumo honor de poder agradecer personalmente al Santo Padre la generosidad demostrada hacia los perseguidos durante el terrible período del nazi-fascismo» (L'Osservatore Romano, 30 de noviembre de 1945, p. 1).



En 1958, al morir el Papa Pío XII, Golda Meir, a nombre del Estado de Israel, envió un elocuente mensaje: «Compartimos el dolor de la humanidad (...). Cuando el terrible martirio se abatió sobre nuestro pueblo, la voz del Papa se elevó en favor de sus víctimas. La vida de nuestro tiempo se enriqueció con una voz que habló claramente sobre las grandes verdades morales por encima del tumulto del conflicto diario. Lloramos la muerte de un gran servidor de la paz».


El Rabino Cohen no puede desconocer la realidad histórica ¿por qué quizo difundir las calumnias contra Pío XII en el corazón mismo de la Cristiandad?


Una de las múltiples obras publicadas por historiadores italianos en defensa de Pío XII. En la foto, su edición española.


Es muy improbable que el Gran Rabino Cohen no haya medido el enorme peso de todos estos testimonios del pueblo hebreo a favor del Papa Pío XII. Lo que sucede es que ese peso se vuelve bastante leve en una época como la nuestra en que las calumnias contra la Iglesia son pan de cada día y son recibidas con afecto por editoriales y grandes medios de prensa internacionales, mientras los católicos vienen siendo acostumbrados a un insensato “mea culpa” histórico por parte del progresismo que domina gran parte de la Iglesia, con esas caretas hipócritas de quienes dicen predicar la fe, cuando en realidad, en vez de pan reparten víboras.


Los infundios divulgados por el Gran Rabino Cohen han de haber regocijado a quienes ya cayeron sin remisión en las redes falaces del escritor inglés John Cornwell, autor de Hitler´s Pope, El Papa de Hitler, lanzado el año 1998, en donde acusa a Pío XII de "antisemitismo y nazismo".

El libro de John Cornwell, como ha hecho notar Eduardo Rivero G. a los lectores de habla hispana, está plagada de mentiras y de falsedades históricas. Dos botones de muestra. Sólo dos para no extendernos demasiado.

En la primera edición en Inglaterra del "Papa de Hitler" (foto arriba), en la contraportada se lee textualmente: “Eugenio Pacelli saliendo de una recepción en marzo de 1939”, con lo que se pretende describir la fotografía de la cubierta del libro, sugiriendo al lector que el Papa (quien había sido electo el 2 de marzo de 1939), se encontraba en marzo en la Alemania de Hitler.


La verdad es que la foto fue tomada en 1927 cuando el entonces Nuncio Pacelli salía de una visita al presidente alemán Hindenburg. Hitler sólo llegará al poder 6 años más tarde, cuando Eugenio Pacelli, el futuro Pío XII, había abandonado hace ya tiempo Alemania y vivía en Roma.



La contraportada de la edición americana (foto arriba) corrigió el texto ... y la foto. El único que aparece enfocado ahora es el Nuncio Pacelli, pero el soldado y la persona que abre la puerta del automóvil están fuera de foco. El casco de guerra del soldado, utilizado por el ejército alemán desde hacía muchísimos años, pero con el cual hemos identificado a los nazis, sí se destaca en la fotografía. Es obvia la mala intención de la empresa editora Viking, que con la aprobación de Cornwell utiliza nuevamente esta fotografía –ahora recortada- con el objeto de asociar físicamente al Papa en la Alemania nazi, lo cual nunca sucedió.

Por otro lado, Cornwell en su libro afirma que estuvo trabajando “durante meses y meses” (el texto inglés dice “for months on end”) en los archivos vaticanos. Mentira. L´Osservatore Romano , en su edición del 13 de octubre de 1999, precisa: “El Sr. Cornwell en su obra afirma haber trabajado en el archivo durante meses y meses, lo cual no se corresponde con la verdad. De hecho, en el archivo se lleva un control estricto del motivo de la visita, del día y el tiempo (horas y minutos) que cada persona emplea en su consulta. De estos controles sabemos que el Sr. Cornwell pasó por el archivo desde el 12 de mayo al 2 de junio de 1997, o sea, durante tres semanas y no los meses y meses que él afirma en su libro. Durante estas tres semanas el Sr. Cornwell no fue todos los días y en los días que iba, con frecuencia, era por períodos cortos".


En los temas de fondo, los infundios de Cornwell, resucitados por el Gran Rabino Cohen en el Vaticano, yacen demolidos por la historiografía seria. Al respecto, recomendamos especialmente el libro del Rabino e historiador judío David G. Dalin, “El mito del Papa de Hitler. Cómo Pío XII salvó a los judíos de los nazis” (foto de abajo), que recientemente ha traducido al español la editorial Ciudadela. No podemos creer que el Gran Rabino Cohen no conozca esta obra de Dalin que desde el propio mundo judío sale al encuentro de las tergiversaciones de Cornwell.


El Rabino Cohen parece ignorar la existencia de la obra de su correligionario, el Rabino David G. Dalin publicada recientemente en EEUU (foto de arriba) en defensa de Pío XII.


No sé qué pasará con el Rabino Cohen y algunos de sus amigos dentro del Vaticano. Pero mientras el Rabino se calma debiera leer las obras precedentes de diversos historiadores judíos que han defendido a Pío XII: “Roma y los judíos” de Pinchas Lapide; “Pio XII y los judíos», de Joseph Lichten; “Judaísmo húngaro y papado” de Jenö Levai; “Informes, documentos y archivos de la Iglesia y el Estado», con una introducción de Robert M.W. Kempner, vicefiscal jefe estadounidense en el proceso de Nüremberg; y más actualmente los trabajos de sir Martin Gilbert, autor de más de setenta libros sobre la segunda guerra mundial y la Shoá.


En el campo no judío, recomendamos las siguientes obras de publicación reciente:




1) Tornielli, A., “Pío XII”, en la foto de arriba.
2) Gaspari, A., "Los judíos, Pío XII y La leyenda negra", con traducción española de Planeta – Testimonio
3) Blet, Pierre., "Pio XII y la II Guerra Mundial", edición de Paulist Press.
4) Marchione, Margherita, "Yours is a Precious Witness", edición de Paulist Press.
5) Marchione, Margherita, "Pope Pius XII architect for peace", edición de Paulist Press
6) Rychlak, Ronald J, "Hitler, the war and the Pope", edición de Genesis Press.
7) Brandmuller, Walter, «L'olocausto nella Slovacchia e la Chiesa Cattolica», traducción al italiano de la Librería Editorial Vaticana, con una documentación imponente del archivo secreto vaticano (Actes et Documents du Saint-Siège relatifs à la Seconde Guerre Mondiale», publicadas en 1970-1981).

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